Después de romper, mi ex quería un paseo salvaje.Obligué, tomándola por detrás.Sus gemidos llevaron a un clímax que nos dejó a ambos satisfechos.Nuestro encuentro fue puramente para el placer, sin compromiso.
Después de separarse, la joven pareja decidió reavivar su chispa.Empezaron con una sesión caliente de sexo de espaldas, con ella pidiéndole que la penetrara por detrás.Él obligó, empujando vigorosamente en sus cálidas profundidades.La vista de su ajustada falda siendo estirada por su miembro palpitante fue suficiente para encender su pasión.Mientras continuaba follándola, ella correspondió alcanzando el orgasmo, su cuerpo convulsionó en éxtasis.La intensidad de su encuentro los dejó a ambos sin aliento, sus cuerpos entrelazados en la felicidad postcoital.