Las citas se convierten en puro sexo en esta categoría, pasando de cafés incómodos a polvos duros en sábanas de motel. Hay risas nerviosas antes de que la ropa vuele y un montón de cabalgadas. En un clip, una pareja usa un reservado cutre de un diner como preliminar, tirando los menús pegajosos a un lado. ¡Es cotidiano pero cañero!