Estos clips tienen a gente inclinada, recibiendo caña en encimeras de cocina que crujen o barandillas oxidadas. Las posturas van desde apoyarse en escritorios hasta agarrarse a respaldos de sillas. En una escena, alguien se aferraba a un otomano gastado mientras le daban por detrás. ¡Todo es cuestión de ese ángulo y energía cruda!