Una paciente ninfómana consulta a un médico sobre su himen inexistente, lo que lleva a un trío caliente con un miembro del grupo sin pelo. La cámara captura cada detalle.
Un paciente hospitalario sensual se siente un poco bajo el clima y busca atención médica.Durante su consulta, su médico observador recoge algunos hallazgos peculiares y decide llevar a cabo un examen exhaustivo.Cuando el doc comienza a explorar, descubre una sorprendente revelación: un himen prístino, una clara indicación de su estado intacto.Intrigado, no puede evitar satisfacer su curiosidad y profundiza más, literal y metafóricamente.El buen doctor, un hombre de muchos talentos, decide tomar el asunto en sus propias manos y se ofrece a aliviarla de su virginidad en ese momento y allí.Siendo una ninfómana, ella está más que ansiosa por complacer.Lo que se despliega a continuación es un encuentro abrazador, con el doc llevándola a nuevas alturas de placer.Esta acción sucia no pasa desapercibida, ya que otro paciente se une a la acción, convirtiéndola en un trío acalorido.Mientras tanto, sus actividades están siendo observadas encubiertamente por una enfermera traviesa, agregando un giro aeurista a la escena ya caliente.